Los Sacramento Kings vencieron la pasada madrugada en la cancha de los Houston Rockets por primera vez desde el 9 de diciembre de 2019. Esta era la décima peor a racha a domicilio de la franquicia californiana.
Los mejores aficionados a la NBA recordarán aquel partido como el que se decidió por un triple de Nemanja Bjelica sobre la bocina y su famosa frase "Fuck it, we deserve this win". Aquella fue la primera temporada con Luke Walton en el banquillo y colocó a los Kings con un balance de 10-13.
Aquel partido solo lo disputaron dos jugadores que continúan en los Kings: Harrison Barnes y Richaun Holmes. El alero sumó 19 puntos y 8 rebotes, mientras que el pívot aportó 16 puntos y 8 rebotes.
La situación de anoche fue algo diferente, al menos para Holmes que lleva sin jugar varias semanas por un asunto personal relacionado con una supuesta agresión hacia su hijo.
En la plantilla de los Rockets ni siquiera quedan jugadores que disputaran aquel partido. Aquel equipo de Houston contaba con hombres como James Harden, Clint Capela o Russell Westbrook. Esa temporada los Rockets fueron el cuarto mejor récord de la Conferencia Oeste y cayeron en semifinales de conferencia frente a los posteriores campeones, Los Ángeles Lakers.
Los Rockets son uno de los dos únicos equipos de toda la NBA a los que los Kings han ganado como locales y visitantes en 2022. El otro equipo son los Oklahoma City Thunder.
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