En apenas tres días, los Kings han pasado de estar a las puertas de Seattle a encontrar dos grupos inversores dispuestos a comprar la franquicia. Primero fue Mark Mastrov, a quién se ha unido la empresa JMA Ventures, un grupo que compró hace unos años un importante centro comercial en la ciudad.

Según el alcalde Kevin Johnson, la ciudad podría invertir hasta 255 millones de dólares si definitivamente la franquicia se mantuviera. Precisamente Mastrov estuvo anoche viendo el partido que el equipo jugó ante Miami Heat junto al alcalde.
A Mastrov y este nuevo grupo interesado en el equipo habría que unir a Ron Burkle quién ya quiso comprar la franquicia en 2011 cuando los Maloof pretendían venderla a un grupo de Anaheim. Además de querer entrar en los Kings, Burkle es accionista de Pittsburgh Penguins.