miércoles, 27 de enero de 2010

La Dura Vida Del Rellenasalarios...

Si existiera un diccionario NBA - Castellano, y Castellano - NBA, podríamos buscar una de las palabras más usadas por los directivos de las franquicias: rellenasalarios.

Dícese de aquel jugador que no tiene otro cometido en los traspasos que completar las diferencias salariales que existen para que se lleve a cabo el intercambio en cuestión. Esa podría ser una definición de ese difícil rol que muchos jugadores, experimentan, y expermentarán, a lo largo de sus carreras.

Hace apenas un par de dias, Bobby Brown -ex jugador de Kings, Timberwolves y Hornets- hacía las maletas por tercera vez en apenas una temporada y media desde que llegó a la NBA.

La carrera de Brown nunca fue fácil. Antes de pasar a profesionales, Brown cubrió una buena etapa de High School -donde fue compañero de Trevor Ariza y Hasan Adams (ex Nets, ex Raptors)- y también en la Universidad de Cal State Fullerton. A pesar de haber completado unos buenos números en su etapa universitaria, Brown no escuchó su nombre en el draft de 2007.

La recompensa llegó un año después, tras asombrar en las filas del ALBA Berlín. Los Hornets le dieron la oportunidad de jugar la Summer League de Las Vegas y Brown cumplió, pero los de New Orleans no le quisieron. A punto estuvo de firmar por el Barça, pero la oferta deportiva de los Kings era mas suculenta.

Apenas cuarenta partidos después, Brown volvía a hacer las maletas, esta vez con destino Minnesota, donde apenas jugaría 20 partidos mas.

Como era de esperar, Brown ejerció su opción para renovar por una temporada mas, era esta vez, o ninguna. Los Hornets le dieron la oportunidad este verano, la misma que le habían negado un año antes.

Saliendo desde el banco, el pequeño Bobby cumplía con el rol de microondas que le habían asignado, pero su rendimiento no era mejor que el de los rookies Darren Collison y Marcus Thornton. Sus días en New Orleans estaban contados. Y así fue.

Los Clippers serán su próximo destino, un lugar, en el que posiblemente sus minutos estén mas contados de lo que estuvieron en los Hornets, pero al menos, tendrá el consuelo de estar cerca de su casa, y con la playa a la vista.