lunes, 4 de agosto de 2008

Arriba Y Abajo...

Nunca un traspaso significo tanto para un tipo que pasó de ser un completo desconocido y al que nadie importaba, para ser el máximo anotador de un equipo de PlayOffs.

Ray Allen y Gary Payton eran los principales protagonistas de un traspaso realizado en la temporada 02-03 y que involucró a otros jugadores como Desmond Mason, Kevin Ollie y nuestro protagonista, Ronald Murray.

Esa temporada, a nuestro amigo Murray solo le dejaron jugar 20 minutos en toda la temporada con la camiseta de los Sonics (R.I.P.) y otros 40 con la camiseta de los Bucks. Apenas sabíamos de su existencia hasta que la temporada siguiente se produjo su eclosión y como si de un pollito se tratara, Ronald Murray salio a la luz. Empezaba la temporada Seattle sin muchas esperanzas. Ray Allen y Rashad Lewis, las estrellas del equipo, tenían que perderse la primera parte de la temporada por diversas lesiones. El objetivo de Seattle ya no era hacer algo grande viendo el panorama que tenían. Jugar por algo mas que ganar 30 era complicado sin sus dos principales, y únicas, estrellas.

Pero algo se mascaba en la ciudad, cuando un joven negro, con el 22 a la espalda se convertía en la estrella del equipo. Sin comerlo y casi sin querer, Flip se había convertido en la estrella del equipo. En apenas medio año, había pasado de ser un jugador “rellena salarios” a un jugador con un enorme talento para anotar desde cualquier sitio y era el líder indiscutible de los Sonios de, mira quien esta aquí, Nate McMillan. Con más de 20 puntos por partido, era la sensación de unos Sonics que se frotaban las manos con las futuras vueltas de Allen y Lewis. Pero cuando estos volvieron, Murray paso a un segundo plano y termino la temporada bien, pero sin destacar tanto. Al final, 12 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias fueron sus promedios.

Las dos siguientes temporadas, Murray no se termino de contrastar en Seattle y simplemente se convirtió en un jugador de banquillo pero sin destacar. 7 y 9 puntos respectivamente en las dos temporadas siguientes, le abrieron la oportunidad de marcharse a un equipo con más aspiraciones. Ese equipo fue Cleveland Cavaliers.

En los Cavs, Flip solo jugo una temporada pero no desentono, dejando constancia su juego a pesar de las insistencias de su entrenador para ponerlo de base, posición que no es la de Murray. 14 puntos (su mejor temporada en este aspecto), 2 rebotes y 3 asistencias le sirvieron a Murray para que, primero Cleveland no le renovara y para que, segundo, los Pistons le quisieran para su banquillo.

En su etapa de Detroit, hizo un buen primer año, con más participación que en el segundo pero con menor anotación. 7-2-3 en su primera campaña en Michigan y 8-2-3 en la segunda. Sensiblemente peor la primera y sorprendentemente, cuando los Pistons mejor van, pasan de Murray e incomprensiblemente lo cortan, dejándolo sin equipo durante apenas 9 días. Después de ese periodo, los Pacers se fijan en el para que sea su segundo base u otro de sus escoltas tiradores. Finalmente, Murray acaba la temporada en Indiana bastante bien con unos números de 11-2-4 (los mejores en general de su carrera)

Ahora, Murray tiene contrato con Indiana pero cualquier cosa le puede pasar a este jugador, que en tres años paso de ser un hombre de 20 puntos, a que los Cavs pasaran de él y poco después Detroit lo cortan como si fuera un temporero mas.

Mucho ha dado de si la carrera de Murray para lo poco que ha sido finalmente. Otro caso de mala administración del talento o simplemente, de no saber estar en el lugar adecuado. El futuro de Murray hace un par de años, pasaba por ser un buen jugador de complemento en casi cualquier equipo pero, todo se frustro poco a poco y Flip se fue diluyendo a lo largo de estos años.