Michigan Wolverines ha conseguido pasar a la tercera ronda del March Madness, después de vencer a Tennessee Volunteers gracias a un trabajo excepcional en la segunda mitad.
Era evidente que Wolverines y Vols iban a protagonizar uno de los partidos más igualados de esta segunda ronda, y así fue hasta el minuto 20. Justo la primera mitad. Hasta ahí le llegó la gasolina a Tobias Harris (19 puntos, 5 rebotes) -que no había fallado ningún tiro en la primera mitad- y a partir de ahí, el partido dejó de existir.
A pesar de haber sufrido durante la primera parte del partido, Michigan se sobrepuso. La segunda unidad funcionó hasta el punto de sumar durante buena parte del primer acto, más punto que los titulares. En este sentido, hay que hacer mención especial para uno de los habituales jugadores de cuarto o quinto nivel: Matt Vogrich (11 puntos, 3 rebotes) que sumó para Michigan cuando más costaba. Su inmaculado 5/5 en tiros de campo, aupó a Michigan en el gran inicio de segunda parte.
Si hasta el descanso el partido había ido manejando ventajas mínimas, el segundo acto cambió el sentido del partido. Michigan salió a morder y lo hizo. Un parcial de 19-2 en seis minutos, destrozó el encuentro. Y entonces llegó el momento de Zach Novak (14 puntos, 10 rebotes). El excelso tirador encontró el camino del aro y mató el partido. Los Wolverines veían el aro como si fuera una piscina y así fue durante los últimos 20 minutos.
El 0/1 en tiros libres de Michigan supone un curioso record, el de ser el primer equipo en la historia de la NCAA en ganar un partido sin anotar desde la línea.
Además de los mencionados Novak y Vogrich, otros cinco jugadores anotaron al menos ocho puntos. Darius Morris (8 puntos, 6 rebotes, 9 asistencias), Tim Hardaway Jr. (11 puntos, 5 rebotes), Evan Smotrycz (8 puntos, 4 rebotes), Jordan Morgan (10 puntos, 3 rebotes) y Stu Douglass (11 puntos, 5 asistencias)
El siguiente rival de Michigan saldrá del ganador del Duke-Hampton, siendo los Blue Devils los grandes favoritos, y se disputará el domingo.
Era evidente que Wolverines y Vols iban a protagonizar uno de los partidos más igualados de esta segunda ronda, y así fue hasta el minuto 20. Justo la primera mitad. Hasta ahí le llegó la gasolina a Tobias Harris (19 puntos, 5 rebotes) -que no había fallado ningún tiro en la primera mitad- y a partir de ahí, el partido dejó de existir.
A pesar de haber sufrido durante la primera parte del partido, Michigan se sobrepuso. La segunda unidad funcionó hasta el punto de sumar durante buena parte del primer acto, más punto que los titulares. En este sentido, hay que hacer mención especial para uno de los habituales jugadores de cuarto o quinto nivel: Matt Vogrich (11 puntos, 3 rebotes) que sumó para Michigan cuando más costaba. Su inmaculado 5/5 en tiros de campo, aupó a Michigan en el gran inicio de segunda parte.
Si hasta el descanso el partido había ido manejando ventajas mínimas, el segundo acto cambió el sentido del partido. Michigan salió a morder y lo hizo. Un parcial de 19-2 en seis minutos, destrozó el encuentro. Y entonces llegó el momento de Zach Novak (14 puntos, 10 rebotes). El excelso tirador encontró el camino del aro y mató el partido. Los Wolverines veían el aro como si fuera una piscina y así fue durante los últimos 20 minutos.
El 0/1 en tiros libres de Michigan supone un curioso record, el de ser el primer equipo en la historia de la NCAA en ganar un partido sin anotar desde la línea.
Además de los mencionados Novak y Vogrich, otros cinco jugadores anotaron al menos ocho puntos. Darius Morris (8 puntos, 6 rebotes, 9 asistencias), Tim Hardaway Jr. (11 puntos, 5 rebotes), Evan Smotrycz (8 puntos, 4 rebotes), Jordan Morgan (10 puntos, 3 rebotes) y Stu Douglass (11 puntos, 5 asistencias)
El siguiente rival de Michigan saldrá del ganador del Duke-Hampton, siendo los Blue Devils los grandes favoritos, y se disputará el domingo.
1 comentario:
Lo siento por el maño. Le pone mucha pasión a los Vols...
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