Han pasado más de siete años desde que Sacramento Kings pisara los playoff por última vez. Poco, más bien nada, queda ya de aquel roster que llevó a la postemporada a la franquicia californiana. A unas horas del inicio de la pretemporada, los Kings preparan la temporada más ilusionante de los últimos tiempos.
La llegada de Vivek Ranadivé con la marcha de los hermanos Maloof ha abierto un período de esperanza en los fans de los Kings. Pero no sólo la llegada del multimillonario asiático ha disparado las ganas de baloncesto. Deportivamente el equipo ha cambiado, pero la pregunta es: ¿lo ha hecho para bien? ¿Es mejor este equipo que el de hace una temporada? Veamos.
Por primera vez desde tiempo inmemoriales, los Kings tienen un base con clara mentalidad pasadora. La llegada de Greivis Vasquez, y la esperada, mejora de Isaiah Thomas hacen una pareja de garantías para la franquicia morada. Complementarios en cualidades técnicas y físicas, Thomas y Vasquez, además del rookie Ray McCallum, mejoran la pareja del pasado curso formada por el propio Thomas y Aaron Brooks -primero- y Toney Douglas, después.
La posición de escolta es, a priori, en la que los Kings sí parecen haber perdido potencial. La salida de Tyreke Evans será una pérdida importante para el equipo salvo que Ben McLemore dé el paso esperado por la franquicia. Las esperanzas de la directiva y propietarios puestas en el ex de Kansas son altísimas aunque, ahora mismo, el equipo sale perdiendo. Marcus Thornton y Jimmer Fredette deberán aportar hasta, al menos, que McLemore confirme las expectativas.
Tras decenas de nombres durante años pasando por el puesto de alero titular, los Kings parecen haber encontrado a un hombre válido: Luc Mbah a Moute. El camerunés, y sus problemas físicos, aterrizan en Sacramento para reforzar el puesto que John Salmons ocupó el pasado curso. Además, es probable que veamos minutos de Travis Outlaw como small forward. Parece lógico pensar que la pareja MAM-Salmons es mejor que la que formaron Salmons y James Johnson la temporada anterior.
La pintura parece ser uno de los sitios donde mayor competencia va a haber en el roster final. Carl Landry, Patrick Patterson, Jason Thompson y Chuck Hayes, además del recién renovado DeMarcus Cousins. Sobre el papel de altas y bajas, la llegada de Landry suple la salida de Cole Aldrich, dejando al equipo en una clara mejoría aunque en distintos roles. Quizás alguno de ellos demasiado similar.
Esta noche comenzamos a comprobarlo.
2 comentarios:
Pues yo creo que en el puesto de 2 al menos ahora hay un proyecto, porque Evans era una falta de actitud en persona. Pagarle 44x4 hubiera sido un suicidio. Bien hicieron en dejarlo salir y poner lo que se ahorraban en el contrato de Cousins. Yo sí confío plenamente en McLemore, que tendrá ayuda con Thornton. Fredette que se pire, los bases molan, los aleros siguen siendo una mierda, Cousins no tiene recambio y hay overbooking en los ala-pívots.
Thomas, Salmons y Patterson deberían salir por rondas o un alero de verdad, McCallum como recambio de Vásquez y amnistía a Hayes
@Fernando
Sí, pero como buen proyecto, puede salirte bien o mal. Y que conste que me parece correcta la salida de Evans viendo que se drafteó a McLemore.
Está claro que sigue haciendo falta un intimidador dentro -el mismo Aldrich me había valido para un apaño- y que sobran AP. Eso, o Malone quiere jugar mucho con JT de 5 y no cuenta demasiado con Hayes.
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