Cuando el pasado febrero los Kings se deshacían de Marcus Thornton, además de una intención puramente económica existía otra razón a mayores: presencia en el vestuario y veteranía. Tanto Jason Terry como Reggie Evans cumplían sobradamente con el rol indicado, aunque el escolta no podría demostrarlo. El verdadero interés estaba en el forward y el tiempo le ha dado la razón a la franquicia.
No tardó demasiado en hacerse un hueco en el vestuario. En los apenas 24 partidos que disputó en Sacramento, Evans tuvo tiempo de promediar sus segundas mejores marcas en la NBA en puntos, porcentaje en tiros de campo y en tiros libres. Pero el efecto duró hasta el inicio del training camp cuando el entrenador Michael Malone lo nombró como uno de los MVP del campus junto a Jason Thompson.
A las buenas palabras de Malone se unieron pronto las del jugador franquicia: DeMarcus Cousins. "Soy un veterano, pero él es mi veterano. Soy todo oídos. Es un chico que verdaderamente respeto en este equipo", decía el center. Desde la llegada de Evans, era habitual ver a Cousins sentado a su lado en el banquillo, pendiente de todo lo que pudiera captar de un jugador como Evans, con once años en la liga a pesar de no haber sido drafteado, ni ser súper atlético, ni tener mucha altura para su puesto.
Tal es el respeto de Cousins hacia Evans, que el veterano desafió al líder del equipo a no recibir más de cinco técnicas esta temporada. Cousins aceptó el reto por Evans le había recordado que no sería un líder si era expulsado.
"Él es el chico al que voy cuando estoy listo para desahogarme. Cuando tengo un problema voy a Reggie", señala Cousins en declaraciones recogidas por el SacBee. "Él me marca objetivos, yo le marco objetivos, nos marcamos objetivos para el equipo".
"Él es el chico al que voy cuando estoy listo para desahogarme. Cuando tengo un problema voy a Reggie", señala Cousins en declaraciones recogidas por el SacBee. "Él me marca objetivos, yo le marco objetivos, nos marcamos objetivos para el equipo".
Aunque deportivamente, quizás muchos aficionados a la NBA pero ajenos a los Kings no entendían el cambio de Evans -más el contrato de Terry- por Thornton, el tiempo y las razones no deportivas y más profundas del vestuario indican que los Kings acertaron con el cambio.
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