"Aprecio el apoyo de la Asociación de Jugadores de la NBA para apelar mi sanción", señalaba DeMarcus Cousins en un comunicado emitido por su agente, John Greig.
Una sanción de dos partidos que la propia Asociación ha considerado "exagerada" y es que Cousins fue suspendido por acercase al ex jugador y comentaristas de televisión, Sean Elliott, después del partido contra San Antonio Spurs ya que al center no le gustó nada lo que había dicho sobre él. El hecho en sí ha supuesto un castigo mayor a Cousins que lo que le supuso a Steve Blake insultar a un fan (una simple multa).
"Quiero disculparme con el equipo, nuestros fans y sobre todo con mis entrenadores y compañeros por esta distracción de nuestros objetivos", añadía Cousins en su comunicado. "Como líder del equipo, tengo que tomar las mejores decisiones para que mis compañeros confíen en mi".
Cousins volverá con el equipo para jugar la madrugada del viernes al sábado frente a Atlanta Hawks en el Sleep Train Arena de Sacramento. Precisamente contra el equipo del estado de Georgia, Cousins tiene sus mejores números de anotación (24) y tapones (1'3) por partidos en los tres encuentros que ha disputado en su carrera contra este rival.
En relación a este tema, el periodista Scott Howard-Cooper ha señalado en su cuenta personal de twitter, que varias personas del entorno de los Kings consideran esta sanción un hecho relacionado con la no venta de la franquicia por parte de los hermanos Maloof.
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