Según el informe publicado por el Think Big Sacramento, el gasto de los aficionados en entradas y demás artículos de la franquicia durante los partidos llegaría a cubrir más de la mitad del dinero necesario para la construcción del nuevo pabellón. El documento, denominado "Highly Preliminary", señala que los aficionados podrían pagar un añadido de uno a tres dólares por entrada.
Ante este aumento mínimo en los precios, las conversaciones están dirigidas para encontrar otra fuente de financiación que evitaría tener que subir ligeramente los impuestos. Así, el political strategist Chris Lehane ha señalado que "la carga será repartida por todas partes", con el objetivo de que no sean los contribuyentes quienes paguen todo, ni tampoco se dependa exclusivamente de la financiación privada.
El informe también contempla la creación de un "distrito de negocios de mejora" en los alrededores del pabellón, en el que hoteles y restaurantes cercanos subirán sus precios para financiar parte de los 387 millones de dólares necesarios.
Ese financiamiento llegará de diferentes puntos de la ciudad, y por supuesto, contará con la ayuda de Sacramento Kings y sus pagos por alquiler del futuro pabellón. Como condición, la franquicia californiana ha puesto que exista un plan de financiación para la próxima primavera.
Además, el próximo 8 de septiembre se hará público un informe más claro, en el que se explicarán las fuentes de financiación y las tarifas.
1 comentario:
Buenas noticas al fin por Sacramento :)
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